¡Y llegó!

Después de muchos meses siguiendo el viaje de esta familia y de una incansable búsqueda de su libro, por fin me ha llegado hoy. ¡Loca por irme a la cama a leerlo!

¡Buenas noches!

Proyectos navideños para el cole

Hoy la gordi vino con las pilas cargadas del cole. Su profesora le dio esta silueta de campanas para decorar en casa y ella llegó gritando: "¡mami, pintar, pintar, pintar!". Bueno no, miento: "mami ¡zumo! ¡pintar, pintar, pintar!"
Manos a la obra. Pero en vez de pintarlas, las decoramos con purpurina ¡gran descubrimiento!

Un poco de pegamento...                                                                
                               

Y ahora tiro esto aquí...

 Y ahora me mancho que es lo que me gusta...

Ella se concentra, ¿eh?

 ¡Listo para llevar al cole!

Lo normal sería pensar que terminó cansada y con ganas de hacer otra cosa, pero no. "¡Más mami, más!" A mí con poco me vale para animarme también, así que venga, vamos a hacer tarjetas navideñas para los compañeros de clase. 

Oye, ¡para tener dos años y medio no se le da nada mal!

Me temo que a partir de hoy voy a tener que llevar siempre una barra de pegamento en el bolso...

¡Besos!

Y el último, ¿descansó?

Son las 9:30 h de la mañana y me acabo de levantar. Duncan sigue durmiendo. Hay silencio en la casa, la tele está apagada, me estoy tomando el cafecito tranquilamente... ¡Ay! ¡Déjame disfrutar de este momento por que será el último! Mañana regresa la gordi de sus vacaciones y volveremos a estar en planta a las 7:00 h, a tener a The Mickey Mouse Playhouse en la tele desde temprano y a desayunar a lo café en mano corriendo detrás de ella por toda la casa. Que sí, que todas adoramos a nuestras pequeñitas, pero estos días de tranquilidad ¡bien que se agradecen!

Pero no todo es relax. Como nos queda poco, tenemos que ponernos las pilas. Antes de que Alba se marchara, pensamos en aprovechar esta semana para hacer su regalo de Reyes. Algo comenté en la entrada anterior acerca de eso y creo que se pudo adivinar de lo que se trataba. ¿Estaba claro, no? Me he pasado, sin exagerar, dos meses dándole vueltas a la idea de hacerle una cocinita. Desde el principio tuve claro que no la quería comprar, pues me niego a que Alba juegue con un armatoste de plasticote, que además no tendría ningún valor, aparte de los euros que habría que pagar. Así que queríamos hacerla nosotros. Peeeeeeero, como aún no la podemos enseñar porque no está terminada, aparco el tema para otra entrada :-)

Además de dedicar la semana a la construcción de la cocinita, he aprovechado también el tiempo libre para cambiar su habitación. El primero y mayor de los cambios era, en un principio, comprarle ya una cama (sigue en cuna), pero esta idea ha tenido que ser pospuesta para el mes que viene, porque en diciembre ya no nos llega el presupuesto. Lo segundo que quería hacer era modificar su cómoda. Cuando Alba venía en camino compramos una cómoda blanca en la tienda sueca con la idea de personalizarla. En su día la decoré con tela rosa y fieltro adhesivo rojo, pero Alba ya es mayor para tanto pastelón y estos colores me daban dolor de cabeza cada vez que entraba a su cuarto. Tela nueva, pomos nuevos y job done! Me encanta, me encanta como ha quedado.

               La original                                          La de bebé

                                                  La de niña "mayor"

                                         En mi opinión, ¡parece otra!

Y lo último que he hecho es cambiar también un marco que tenía que, al igual que la cómoda, se había quedado muy desfasado. Lo compramos en la misma tienda y en su día lo aproveché para hacer un collage con las cientos de tarjetas que recibimos por parte de la familia escocesa. Aquí en España no tenemos una "cultura de tarjetas" tan arraigada, pero en Escocia ¡si no regalas una tarjeta poco menos que haces un feo! Imagínate la de tarjetas que recibimos, que compuse estos dos marcos y me sobraron un montón. Ahora los he modernizado, pinté el fondo y pegué unas postales muy alegres que compramos este verano durante el crucero que hicimos por el Báltico.

Uff, ya está bien por hoy. ¡Voy a despertar a este hombre!
¡Besos!

La Inmaculada... repostera

Parece una ironía que el momento en el que nos decidimos a escribir este blog y compartir la felicidad de ser tres sea justiiiito cuando la gordi está de vacaciones con los abuelos. O bueno, quizá haya sido por eso, ¿estaremos echándola de menos? ;-)

La verdad es que mi madre se ocupa muy bien de mandarnos cada día una dosis suya. Hoy nos ha deleitado con estas fotos de la gordi iniciándose en la repostería. Tan mona...

Lo que no sabe ella es que la temática nos viene que ni pintada para la sorpresa que le estamos "cocinando" estos días. Con estas manitas escocesocanarias le estamos haciendo su regalo de Reyes, ¡del que ya hablaremos cuando esté a punto de caramelo!

Para acabar, el postre, que es el mini-árbol navideño que compramos hoy. No estábamos muy por la labor de poner decoración navideña este año, más que nada por que no pasaremos las fiestas en casa, pero bah, un detallito, ¿¿no?? Mi hermana se ha burlado, pero yo no creo que esté taaaan mal!

Y con esto y un bizcocho....!!

Somos tres con Alba

Pues no sé si acabaremos publicando esto o no. No es la primera vez que empiezo a hacer un blog, abro la cuenta, lo diseño, escribo la primera entrada... y luego me doy media vuelta y me voy. Ya me pasó hace unos cuatro años cuando decidí escribir y enseñar la bisutería que hacía. Un año más tarde hice igual, cuando empecé a hacer detalles y accesorios con fieltro y fimo. El siguiente intento fue al quedarme embarazada, cuando me pasaba las tardes decorando ropita con fieltro para mi nena: baberos, bodies, camisetas, haciendo móviles, etc. Pero siempre me di media vuelta y me fui. ¡Así que no sé que va a pasar después del punto y final de esta entrada!

Si no la publico, sentiré como las veces anteriores: seguiré devorando blogs por la web y sintiendo que tengo algo pendiente que hacer. Y si la publico, desde ya doy la bienvenida a mi novio, a todo aquel que nos quiera leer y, claro, a mí misma por la "valentía"!


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